Sombrero: el regreso de un clásico

Si crees que "todo vuelve"... estás en lo cierto. Aquellas imágenes de las inolvidables divas de Hollywood cuya mirada enigmática se asomaba debajo de un velo o el ala de un sombrero tan grande como su belleza, salen de las fotografías amarillentas de las revistas para instalarse con más fuerza que nunca en el invierno europeo.

Así es: los sombreros vuelven a ser el accesorio "obligatorio" de esta temporada. ¿Que no sabes cuál usar? Pues... todos. Pequeños casquetes de terciopelo, grandes sombreros propios de Ascott, boinas a la "francesa", turbantes marroquíes. Todo aquello que sea suceptible de ser llevado con estilo sobre tu cabeza, deberá tener un lugar de protagonismo en tu guardarropas.

Algunos consejos imperdibles:

• Puedes encontrarlos tanto en las tiendas de las principales marcas como en los mercadillos artesanales.
• Para el día: de telas rústicas, rafia, coloridos, divertidos.
• Para la noche: terciopelo, lentejuelas, negros, con tul, antiguos, con plumas.
• Si eres joven: un sombrero clásico te aportará estilo y refinamiento. Uno más jovial y moderno, acentuará tu personalidad juvenil. Usalos para comunicar tu estado de ánimo.
• Si eres mayor: un sombrero clásico pondrá ese toque de distinción que debe llevar toda dama. Uno más colorido y moderno... con cuidado.

¿Con qué prendas combinar un buen sombrero?

• Anímate a jugar con los colores complementarios. El sombrero puede ser el protagonista o bien acompañar el resto del vestuario.
• Un vestido clásico negro, blanco o rojo, adquiere sofisticación y presencia si lo luces con un gran sombrero de ala negro en rafia o terciopelo.

Como ves, la función que cumplía casi exclusivamente la bijoutería, ahora ha quedado en manos de este inefable accesorio, que a pesar de las modas cambiantes y ciclotímicas, siempre guarda un lugar de importancia en el guardarropas de toda mujer que desee estar a la moda, con clase.